Miguel Rodríguez y Reinhard Wallmann advierten que la desescalada puede no ser igual en todos los municipios por su propia evolución epidemiológica y que “en cualquier momento” se puede volver a escalar de forma “rápida y eficaz”
En estos momentos, Cantabria se encuentra en nivel de riesgo 2 (medio), pero con varios indicadores, como el de Incidencia Acumulada (IA) de casos diagnosticados en 14 días o la ocupación de camas de hospitalización de cuidados críticos por casos Covid-19, aún en nivel de alerta alto (3).
Por eso, “teniendo en cuenta esta situación epidemiológica”, la Consejería de Sanidad esperará hasta la próxima semana para “adoptar nuevas medidas sanitarias”, una vez se consolide el nivel de riesgo medio. Hasta entonces, “hay que ser prudentes”.
Así lo han explicado el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, y el director general de Salud Pública, Reinhard Wallmann, en su comparecencia semanal para explicar la evolución de la pandemia en la región.
Cuando llegue ese momento, ha dicho el titular de Sanidad, y siempre respetando el documento consensuado de ‘Actuaciones de respuesta coordinada para el control de la transmisión de Covid-19’, se ampliarán los aforos al 50%, con un número máximo de 30 personas, en ceremonias, velatorios, entierros, bodas o bautizos, entre otros.
Además, ha detallado Rodríguez, se prevé abrir las zonas interiores de los establecimientos de hostelería y restauración con el límite máximo del 50% del aforo, aunque el porcentaje definitivo se concretará la semana que viene. “Las terrazas seguirán con un aforo del 75%, sin consumo en barra”.
En relación al ámbito cultural, la previsión, tal y como marca el documento, es incrementar los aforos hasta el 75%; y respecto a la actividad deportiva en interiores, se establecerán aforos del 50% “con medidas de protección” que implican llevar mascarilla de forma obligatoria en las zonas comunes.
Al hilo de estas medidas de flexibilización, Miguel Rodríguez ha querido puntualizar que “podrían no afectar por igual a todos los municipios”, puesto que dependerán de su propia evolución epidemiológica, en clara alusión a Los Corrales de Buelna, Cabezón de la Sal y Reocín, que en estos momentos tienen el farolillo rojo.
Además, ha advertido el consejero, “para desescalar se exige la consolidación de los datos epidemiológicos, pero si hay que escalar porque empeora la situación, se hará de forma rápida y eficaz”.
Fuente : https://www.cantabria.es/web/gobierno/detalle/-/journal_content/56_INSTANCE_DETALLE/16413/13047016